Lejos del ruido mediático que generó su reciente y aún enigmática separación de Nico Vázquez, la vida de Gimena Accardi dio un giro de 180º durante los últimos días. La actriz decidió armar sus valijas e irse de vacaciones, eligiendo el sur de España como destino para reencontrarse consigo misma en un momento personal muy particular y sensible.
En medio de esa búsqueda personal, Gimena vivió una experiencia que no pasó por alto para nadie. A una semana de haber llegado a España, viajó a Málaga y fue parte de una de las celebraciones más emblemáticas de la región: el Día de la Virgen del Carmen, un evento que tiene mucha historia de fondo.
Emocionada con cada uno de los registros de sus días de descanso, Accardi compartió con sus seguidores una serie de imágenes y videos desde el corazón de la procesión, donde dejó ver su lado más sensible y conectado con lo espiritual. El momento más emotivo llegó cuando la imagen de la Virgen fue llevada en una barca engalanada por la bahía, en una tradición que se repite cada 16 de julio.
En medio de ese esplendor y lo maravilloso que resulta esta celebración, al ver a la Virgen pasar, Gimena no contuvo su emoción y soltó un grito que lo dijo todo: “¡Guapa!”, exclamó, mientras aplaudía desde la orilla. Un momento de disfrute y admiración total, en medio de la polémica que se tejió por estos días con respecto a su separación de Nico.
LAS VACACIONES DE GIMENA ACCARDI POR ESPAÑA TRAS SU RUPTURA CON NICO VÁZQUEZ
La devoción a la Virgen del Carmen en Málaga tiene siglos de historia. Patrona de los pescadores y marineros, su festividad se celebra con misas, ofrendas florales, música y una procesión marítima que reúne a vecinos, turistas y fieles en barrios pesqueros como El Palo, Huelin o Pedregalejo. Su imagen es trasladada por las cofradías hasta el mar, donde se le pide protección para quienes viven del agua.
Para Gimena, no fue una simple visita turística. Se la vio emocionada, conectada con la ceremonia y abierta a vivir cada instante con intensidad. En su Instagram compartió los colores, los sonidos y la energía del lugar sin necesidad de explicar demasiado. Las imágenes hablaban por sí solas.
Separada de Nico tras 18 años de relación, la actriz eligió el silencio como respuesta frente a las versiones y especulaciones. Pero este gesto, este viaje, esta participación en una tradición que mezcla fe, mar y comunidad, dejó en claro que está buscando algo más profundo. Y tal vez, sin decirlo, lo esté encontrando.