La historia entre Leandro Paredes y Boca parece un guion de telenovela que todavía no tiene su capítulo final. El mediocampista de la Roma, con pasado azul y oro y presente en la Selección Argentina, volvió a dejar la puerta abierta a un posible regreso al club que lo vio nacer, en la previa del partido con Chile por las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial 2026.
Sin embargo, eligió no alimentar expectativas: “Si se tiene que dar, se dará”, dijo en una entrevista con Telefé. El volante, que actualmente se encuentra suspendido y no viajó con el seleccionado, habló con la periodista Sofía Martínez y explicó por qué prefiere el silencio.
“Cada vez que uno habla, se generan expectativas. La gente está muy ilusionada y yo prefiero que las cosas sucedan, no prometer nada”, expresó con mesura. Desde hace tiempo, Juan Román Riquelme busca concretar el regreso del volante, y aunque sobre el papel la operación no parece compleja, los hechos han demostrado lo contrario.
El Xeneize cuenta con una cláusula de salida favorable de apenas 3.5 millones de euros, pero el acuerdo sigue sin cerrarse. Las diferencias salariales y algunos cortocircuitos del pasado todavía pesan. En ese sentido, el propio entorno del jugador ha sido crítico.
Meses atrás, su padre señaló que esperaba “más voluntad” por parte del club de la Ribera para sellar la operación. Desde la dirigencia, en cambio, consideran que fue el jugador quien no hizo lo suficiente para destrabar su salida de la Loba.
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Así, entre reproches cruzados y negociaciones estancadas, lo que parecía una vuelta sencilla se complicó con el paso del tiempo. También está en la mesa la Scaloneta, ya que Lionel Scaloni prefiere seleccionar futbolistas del ámbito internacional, lo que limitaría sus posibilidades de cara al futuro jugando en el fútbol argentino.
Leandro Paredes y Boca, una telenovela de nunca acabar
Paredes jugó 31 partidos en su etapa inicial en Boca y convirtió cinco goles antes de emigrar a Europa. Su calidad no está en discusión y en Brandsen 805 saben que se trata de un refuerzo de jerarquía. Pero la situación todavía no está resuelta. Por ahora, Boca espera, el hincha sueña y Paredes opta por el bajo perfil. ¿Se dará?
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